La isla de Ibiza es conocida por sus playas de ensueño, su ambiente nocturno y su cultura hippi. Pero, más allá de toda la fama que ha logrado, tiene otra faceta que no muchos conocen: su patrimonio histórico y cultural. Un ejemplo de ello son las antiguas canteras de marés que se encuentran por toda la isla. Estas canteras son testigos mudos de la importancia que tuvo en su momento la construcción en la isla y del ingenio de sus antepasados.
La piedra de marés es una piedra sedimentaria muy usada en la construcción de edificios tradicionales de Ibiza. Se caracteriza por su tonalidad blanquecina y por sus propiedades aislantes y resistentes al agua. Se encuentra principalmente en la isla de Ibiza, pero también se puede encontrar en otras zonas del Mediterráneo. Los antiguos habitantes de Ibiza aprendieron a extraer esta piedra de las canteras de marés, creando así un patrimonio arqueológico que aún perdura.
Las canteras de marés se encuentran en diferentes puntos de Ibiza. En la mayoría de los casos, están cerca de la costa, lo que facilitaba su transporte por vía marítima en el pasado. Algunas de las canteras más conocidas son Cantera des Falco, Cantera de s'Esclat, Cantera de sa Coma, entre otras. Todas ellas tienen una historia y un diseño diferentes, lo que las convierte en una visita imprescindible para los amantes de la arqueología.
Esta cantera se encuentra en la zona noreste de la isla, cerca del puerto de Sant Miquel. Es una cantera muy bien conservada y de fácil acceso. Se puede observar su forma circular, típica de las canteras de marés de la época. Además, ofrece una vista impresionante de la costa de la isla.
Esta cantera se encuentra en la zona suroeste de la isla. Tiene una historia interesante, ya que se cree que fue la cantera más importante de la isla en su momento. Se puede observar sus diferentes niveles de extracción, su pasillo central y su forma circular. Además, está rodeada de un paisaje natural impresionante.
Esta cantera se encuentra en la zona centro-sur de la isla, cerca del pueblo de Sant Josep. Es una de las canteras más famosas de Ibiza, ya que ha sido utilizada por muchos artistas para crear obras de arte. Su forma es rectangular y tiene un pasillo central que conduce a la zona de extracción.
La piedra de marés ha sido utilizada en la construcción de edificios en Ibiza desde la época fenicia. Su uso se extendió a lo largo de los siglos, alcanzando su auge en el siglo XVIII. Los edificios más representativos de Ibiza, como las iglesias, las casas payesas y las murallas, están construidos con piedra de marés.
Las iglesias son los edificios más representativos de la arquitectura de Ibiza. La catedral de Santa Maria de la Ciudad, la iglesia de Sant Antoni de Portmany y la iglesia de Sant Rafel, son solo algunos ejemplos. Todas ellas están construidas con piedra de marés, lo que les confiere esa tonalidad blanquecina tan característica de la arquitectura ibicenca.
Las casas payesas son las construcciones típicas de la isla de Ibiza. Estas casas, que fueron creadas por los primeros habitantes de la isla, están construidas con piedra de marés y tienen un tejado plano. Ejemplos de ellas se pueden encontrar en cualquier rincón de la isla.
La muralla de la ciudad antigua de Ibiza es una de las atracciones turísticas más importantes de la isla. Esta muralla, que rodea la denominada Ciudadela de Dalt Vila, fue construida en el siglo XVI y se encuentra en excelente estado de conservación. Los muros de la muralla están construidos con piedra de marés y ofrecen al visitante una belleza arquitectónica única.
Las antiguas canteras de marés en Ibiza son un patrimonio arqueológico único en el mundo. La extracción y el uso de la piedra de marés en la construcción de edificios tradicionales de la isla nos habla de la importancia que tuvo en su momento la construcción y del ingenio de sus antepasados. Visitar las canteras de marés es una manera de conocer la historia y cultura de Ibiza de una manera diferente.